Heráldica: Finrod.

Emblema:

La divisa de Finrod presenta una antorcha y un arpa como sus motivos principales. Se cuenta que cuanto encontró por primera vez a los hombres, cogió un arpa y se puso a cantar mientras ellos dormían. Se dice, y por su diseño así lo parece, que fue la casa de Bëor quien confeccionó la divisa de Finrod, pues es más similar a la de los hombres que a las élficas.

Historia:

Finrod nació en Valinor, primogénito de Finarfin y Eärwen de Alqualondë, donde recibió el nombre de Findárato (“campeón de los cabellos”). Tuvo como hermanos a Orodreth, Angrod, Aegnor y Galadriel. De su padre heredó su rostro agraciado, sus dorados cabellos, su nobleza, su coraje y generosidad. De su madre Telerin heredó la pasión por el mar.

En Eldamar se hizo amigo de Turgon, hijo de Fingolfin, uniéndose de mala gana a la rebelión de los Noldor dirigida por Fëanor tras el robo de los Silmarili por Morgoth. Amarië, su amada, no le acompañó en el exilio.

Aunque la Casa de Finarfin no participó en dicha rebelión, él y sus hermanos decidieron seguir a los hijos de Fingolfin. Fue uno de los caudillos de los seguidores de Fingolfin que condujo a los Noldor a través de Helcaraxë, pues los barcos de los Teleri asesinados que les debían conducir a la Tierra Media fueron utilizados por Fëanor, que los quemó al llegar a la costa. Participó en la Dagor-nuin-Giliath, tras la llegada de los ejércitos de Fingolfin, cuando se elevó la Luna por primera vez.

Una vez en Beleriand, se estableció primero en Tol Sirion, que dos años después de la Dagor Bragollach caería en manos de Sauron, pasando a llamarse Tol-in-Gaurhoth, la Isla de los Licántropos. Tras la inspiración recibida en sueños por el Vala Ulmo y guiado por los consejos del rey Thingol de Doriath, construyó en las cavernas bajo el Alto Faroth en Nargothrond, el reino más grande de Beleriand, convirtiéndose en el señor de todos los Elfos desde el río Sirion hasta el Mar (exceptuando las Falas). Recibió ayuda de los Enanos de las Montañas Azules, con quien trabó gran amistad. De esta relación nació Nauglamír, el Collar de los Enanos, creado especialmente para el nuevo Rey de Nargothrond. Recibió de los Enanos el sobrenombre de Felagund, el Señor de las Cavernas. Ayudó durante su reinado a los Falathrim de Círdan en la reconstrucción de las ciudades de Brithombar y Eglarest y creó un fructífero comercio entre todos los reinos.

Sin embargo le hizo un triste juramento a su hermana Galadriel, muchos creen qu por nostalgia de su querida Amarië:

"Nada perdurará en mi reino que un hijo pueda heredar."

Durante la Dagor Bragollach quedó rodeado por los Orcos en el Marjal de Serech, pero fue salvado gracias a la intervención de Barahir, Edain de la Casa de Bëor. En pago por este servicio, recibió el anillo de Finrod como prenda de ayuda a su casa, anillo que pasó a llamarse "Anillo de Baragir" y que fue una de las heredades de los Reyes de Númenor y sus descendientes. Cuando años después Beren, hijo de Barahir, fue a Nargothrond en busca de ayuda en la Búsqueda del Silmaril, Finrod partió con él. Se enfrentó a Sauron en un duelo de canciones de poder, en el que fue derrotado por el Señor de la Sombra, siendo encerrado junto a Beren en las mazmorras de Tol-in-Gaurhoth. Murió luchando contra un licántropo defendiendo a Beren.

Fue tal la lealtad y entrega de este noble elfo, tanto para sus parientes más cercanos los Noldor, como para sus familiares Teleri, así como su ascendencia Vanyar, para con los Enanos y para con los Hombres, hasta el punto de entregar la vida por uno de ellos, que fue premiado por los Valar, de forma tal, que su espíritu no permaneció en las Estancias de Mandos, sino que se le volvió a donar un cuerpo y desde entonces vive con los elfos de Aman, junto a su padre.